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LIMPIO (Gladys Villalba, corresponsal). El doctor Ennamnuel Fariña decidió no callar más y denunció la falta de insumos y equipos médicos, así como insuficiencia en materia de recursos humanos en varias áreas del nosocomio. Dijo que urge la adquisición de monitores y de una máquina para entubamiento.
El galeno expresó que la única ambulancia funciona solamente en horas de la mañana, debido a la falta de chofer para otros turnos. “Los médicos hacemos la gestión para traslados de enfermos a otros hospitales en casos de urgencia. Si no se consigue ambulancia, usamos nuestros vehículos propios”, indicó Fariña.
Lamentó la falta de sistema de agua potable para consumo de los pacientes, personal médico, familiares y visitantes. Explicó que semanalmente Bomberos Voluntarios de Mariano Roque Alonso llevan agua en un carro hidrante para llenar el tanque de unos 50.000 litros ubicado en el patio del Hospital.
“No es agua potable. No conocemos el origen del agua y sabemos que ellos se abastecen de cualquier lado”, dijo el médico.
En el fondo del hospital se acumula basura, pese a que cuenta con servicio de limpieza a cargo de tres personas.
Diariamente el hospital recibe un promedio de 100 pacientes que vienen de diversos puntos de nuestro país. Actualmente hay en el lugar 30 internados entre adultos, niños y embarazadas.
El nosocomio no tiene quirófano y el equipo de radiografía funciona solo tres veces a la semana por falta de personal. Además, en el laboratorio se atiende de lunes a viernes en el turno mañana y en ecografía tres veces a la semana.
El personal de blanco no cuenta con cobertura de vacaciones.
“Hacemos malabarismo durante nuestras guardias. No hay sala de partos, kits de partos, ni quirófano para casos de urgencias. Lo que más molesta es que los directivos no buscan soluciones”, expresó el doctor Fariña.
“Está bastante bien...”
El director general del Hospital del Indígena de Limpio, Roberto Riveros, aseguró que necesidades de insumos no tienen y que cuentan con una cobertura óptima en cuanto a medicamentos. “No podemos quejarnos”, afirmó.
En cuanto a limpieza, dijo que en el hospital se tienen encargadas del área, pero que no es insuficiente. Afirmó que la Municipalidad local recolecta la basura dos veces por semana. En cuanto al suministro de agua potable, refirió que hace una semana culminó la construcción de un pozo artesiano para el hospital”, aunque no negó que los bomberos se encargan del abastecimiento de agua al local sanitario y afirmó que es potable.
“Yo diría que estamos bastante bien, pero falta. Me gustaría que esto funcione como un verdadero hospital y crezca para evitar el traslado de pacientes”, dijo Riveros.