ITAUGUÁ, Dpto. Central (Patricia Meza, corresponsal). Unas 500 personas que componen el grupo que invadió primero el Cuartel de la Victoria y luego la Plaza de Armas se instalaron el martes en un inmueble de aproximadamente 67 hectáreas de esta ciudad. Están encabezados por Rodrigo Rojas, quien se presenta como líder del “Movimiento Revolucionario Desde Abajo”.
La propiedad corresponde a la fracción Los Naranjos, ubicada a cuatro kilómetros de la Ruta 2 “Mariscal Estigarribia” y pertenece a la Inmobiliaria del Este SA (Idesa). Abarcaron cinco manzanas que afectan a 19 lotes con diferentes dueños.
Los propietarios de estos lotes así como Idesa realizaron la denuncia por invasión de propiedad privada y exigen el desalojo de los ocupantes ilegales.
Según explicaron los invasores, se trasladaron a Itauguá para asentarse en un inmueble del Estado donde se encuentra el asentamiento “Vecinos Unidos”. Al llegar al lugar se encontraron con que ya estaban ocupadas por otras 500 familias que fueron beneficiadas con programas estatales para la vivienda propia e incluso lograron abrir una escuela.
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A causa de esa situación con que se encontraron, los supuestos sintechos decidieron cruzar al otro lado de la calle y ubicarse en la fracción Los Naranjos.
Las 500 familias que se encuentran en el asentamiento Vecinos Unidos desde hace 26 años también solicitan el desalojo de los supuestos sintechos. Aseguran que entraron en forma irregular en el lugar y que perturban la paz de la comunidad.
El líder del asentamiento Vecinos Unidos, José Ruiz Díaz, indicó que el 22 de mayo de 2002 se ubicaron en el lugar 107 familias beneficiadas con viviendas del Estado y una escuela pública. Desde entonces, mediante trabajo comunitario con autogestión desarrollaron la comunidad.
Ruiz Díaz lamentó que el presidente del Instituto Nacional de Desarrollo Rural y de la Tierra (Indert), Justo Cárdenas, no se haya acercado a hablar con los ocupantes legales y responsabiliza al Estado de cualquier derramamiento de sangre que pudiera ocurrir en el lugar. Afirmó que no permitirán que los invasores destruyan su barrio.
Por último, Ruiz Díaz mencionó que el lugar donde se instalaron los invasores es muy cuidado y que un arroyo cruza por el lugar. Desde la llegada de los ilegales está siendo contaminado, advirtió el dirigente vecinal.