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El religioso salesiano llegó al país en 1954 y a los pocos años se internó en esta región chaqueña, donde trabajó y sirvió por más de medio siglo a la comunidad.
El cura se enfocó principalmente en las comunidades indígenas de los Maskoy y los Ayoreos.
Sus restos son velados en la parroquia Domingo Savio de San Lorenzo y el sepelio está previsto para hoy a las 11:00.
El obispo del Chaco, Gabriel Escobar, destacó la labor desplegada por el pa’i Luis Nardón.
Mencionó que fue un misionero salesiano que amó las tierras del Chaco. Contó que se entregó de lleno a la tarea pastoral de evangelización, en todos los frentes y por sobre todo con los más desposeídos, como el caso de los pueblos nativos.
El arzobispo de Asunción, Edmundo Valenzuela, quien por varios años estuvo al frente del obispado de esta región chaqueña, manifestó que el sacerdote siempre sobresalió por su vocación de entrega y su entrañable amor por los indígenas, en especial por los ayoreos. “Fue todo un ejemplo con su oración diaria”, expresó la autoridad eclesial.
El pa’i Luis estuvo trabajando en el departamento de Alto Paraguay hasta el año pasado.