ENCARNACIÓN (Juan Augusto Roa, de nuestra redacción regional). En 15 días se inician los trabajos de refulado de arena en las tres playas de la ciudad: San Isidro, San José y Mboika’ê, lo que permitirá contar con playas limpias y atractivas para los veraneantes. Asimismo, la próxima semana comenzará la reparación y sustitución de las boyas de demarcación que separan las zonas permitidas para la presencia de bañistas y el área hasta donde se permite la aproximación de embarcaciones.
Paralelamente, personal de la Marina paraguaya capacita a unos 25 rescatistas acuáticos que serán contratados por la Municipalidad para el cuidado de los bañistas en las tres playas.
En materia de infraestructura, en el último año la ciudad cuenta con una mayor oferta hotelera, de diferentes niveles y de costos. Además, dispone de opciones para alquiler de viviendas y departamentos por días o semanas, propuestas muy ventajosas para las familias por la comodidad y la economía.
En gastronomía, la ciudad experimentó un verdadero salto respecto de la anterior temporada, con la habilitación de nuevos locales donde se ofrecen comida mexicana, española, china y japonesa, que se sumaron a la ya nutrida variedad existente.
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En ese sentido, uno de los sitios de mayor atractivo de la ciudad es el llamado “Paseo gastronómico”, que consiste en toda una manzana destinada exclusivamente a la instalación de restaurantes. Está frente a la playa San José, en el lugar de mayor concurrencia de turistas.
Si bien la temporada veraniega no se inició y las playas aún no fueron habilitadas, la llegada de delegaciones de turistas es incesante. Los días cálidos, tras un invierno inusualmente frío de este año, invitan a propios y extraños a recorrer la costanera “República del Paraguay”, disfrutar de paseos en triciclos y bicicletas que se alquilan en el lugar, o simplemente caminar.
La visita a Encarnación se complementa con la posibilidad de recorrer las zonas rurales de Itapúa, donde existe un interesante circuito de turismo histórico, como las Reducciones Jesuíticas de Jesús y Trinidad, las dunas y el observatorio astronómico de San Cosme y Damián y el trabajo de los inmigrantes de diversas nacionalidades.