Lavandería del Incan funciona a duras penas

CAPIATÁ (Antonia Delvalle C., corresponsal). La lavandería del Instituto Nacional del Cáncer (Incan) cuenta con dos lavarropas. Una es de cuando se fundó el hospital hace 31 años y que tenía capacidad para procesar 100 kilos de prendas, pero actualmente apenas puede operar con 7 kilos. La otra máquina fue adquirida hace unos 10 años, con capacidad de 100 kilos y al igual que la anterior sufre permanentes desperfectos.

Similar es la situación de las dos secarropas y la centrifugadora del servicio, que a duras penas entran en funcionamiento. A estos equipos se suman las maquinarias vetustas del servicio de esterilización del área de quirófanos.

Otro grave problema es que se cuenta con escaso personal en el Servicio de Lavandería. Son cuatro funcionarias para el turno mañana, más la jefa que también ayuda a lavar; y tres por la tarde.

Los fines de semana prestan servicios dos trabajadoras, más otras dos en ropería, que son las que se encargan de confeccionar nuevas prendas y coser las que requieran de arreglos.

El secretario general del sindicato del Hospital del Cáncer, doctor Gustavo Campos, señaló que le resulta inadmisible que hasta hoy la lavandería se encuentre en este estado calamitoso, con equipos totalmente obsoletos y una gran necesidad de recursos humanos.

“Resulta increíble que las ropas de quirófano tengan que llevarse al Hospital de Itauguá para lavar, y después secarse en el Instituto Nacional del Cáncer (Incan), para luego meterse al autoclave (equipo de esterilización) prehistórico con el que contamos”, acotó.

Dijo que ya es hora de que el Ministerio de Salud Pública reemplace los vetustos equipos del único hospital del cáncer del país.

El director del Incan, doctor Julio Rolón, señaló que al poco tiempo de asumir el cargo solicitó con urgencia la compra de nuevos equipos, y la licitación para la adquisición fue declarada desierta en dos oportunidades.

Añadió que está en etapa de adjudicación la compra de dos lavadoras y un secarropas; y para reforzar el área de lavandería asignó a un funcionario más.