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El estudio mostró que el número de personas que piensa que el Gobierno de Temer es “malo” o “muy malo” creció del 28% alcanzado en junio al 36,7% de octubre.
También aumentó el rechazo a la forma en que gobierna Temer, de 40,4% a 51,5%. Aunque el porcentaje de quienes califican a la administración como “buena” o “muy buena” subió de 11,3 a 14,6%.
La popularidad del Gobierno de Temer se ha visto afectada por las acusaciones de corrupción contra varios de sus integrantes y miembros de su partido, el PMDB.
No obstante, un 58% de las personas consultadas considera que el presidente cuenta con suficiente apoyo del Parlamento para conseguir las modificaciones a la legislación con las que se busca cubrir el enorme déficit fiscal del país, en particular una reforma al oneroso sistema de pensiones.
Temer ha impulsado medidas de austeridad para equilibrar las finanzas del Gobierno y promueve un proyecto que limita el gasto público.