Mientras en la Casa Blanca se preparaba la primera reunión del presidente estadounidense, Donald Trump, y la primera ministra británica, Theresa May, Merkel y Hollande escenificaron en Berlín la unidad del eje franco-alemán en defensa de una Unión Europea criticada por las fuerzas populistas y cuestionada desde Washington y Londres.
Mientras Merkel alertaba de la “profunda ruptura” que supondrá el brexit (salida del Reino Unido de la UE) y subrayaba la necesidad de actuar cuando “el marco global cambia de forma rápida y dramática”, Hollande hacía hincapié en que las amenazas a Europa no solo son externas.
Hollande, próximo a dejar el cargo y cuando las encuestas auguran que el ultraderechista Frente Nacional conseguirá acceder a la segunda ronda de las presidenciales francesas en mayo, destacó el riesgo de los populismos y los extremismos.
“Ambos coincidimos en nuestra convicción de que solo podremos afrontarlos (por los desafíos) en conjunto”, manifestó la canciller alemana.
Todos los beneficios, en un solo lugar Descubrí donde te conviene comprar hoy
Ante la próxima cumbre europea de Malta y la reunión en la que se conmemorará el 60° aniversario del Tratado de Roma, que dio origen a la UE, Merkel pidió a los socios e instituciones comunitarias que expongan todo lo logrado y los beneficios de mantener la cooperación.
Ambos mandatarios abogaron por dar pasos en las prioridades fijadas en septiembre en Eslovaquia, donde los 27 –sin el Reino Unido– se comprometieron a avanzar en áreas concretas, como la protección de las fronteras exteriores y la seguridad, la creación de puestos de trabajo para los jóvenes y el mercado único digital.