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CARACAS (EFE). El líder opositor lleva seis días fuera de Venezuela omitiendo la prohibición de salida del país que le dictó el régimen, recorriendo los países de la región, que le han brindado su apoyo.
Ayer se reunió con el presidente brasileño Jair Bolsonaro, y hoy visita el Paraguay para reunirse con el mandatario Mario Abdo Benítez.
Guidó cruzó a pie la frontera hacia Colombia el viernes pasado, horas antes de que Maduro ordenase el cierre de estos pasos y ante la presencia reforzada de decenas de militares en la zona, algunos de los cuales le ayudaron en su periplo, según él mismo dijo.
Gracias a esta osadía, el líder opositor pudo protagonizar el concierto “Venezuela Aid Live” realizado en la ciudad colombiana de Cúcuta a favor de la ayuda humanitaria para su país.
Al siguiente día, Maduro respondió con fuerza y reprimió el intento de ingresar las donaciones de alimentos y medicinas.
Se tenía previsto que las toneladas de ayuda humanitaria entraran al país el pasado sábado, pero solo un camión que logró burlar las bombas lacrimógenas y los perdigones empleados por la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) en estas zonas limítrofes.
Los enfrentamientos entre manifestantes y las fuerzas del orden, que dejaron unos 300 heridos y al menos cinco muertos, también han robustecido la postura de Guaidó ante la represión del régimen chavista.
Un primer lote de ayuda humanitaria ingresó a Venezuela la primera quincena del mes y ya está siendo distribuida por organizaciones no gubernamentales a mujeres embarazadas y otros grupos vulnerables según anunció en su momento Guaidó, y confirmaron los entes implicados en estas donaciones.
Quizás la mayor tarea es convencer a los militares (sostén del régimen) de no reconocer al gobierno de Nicolás Maduro por haber obtenido su elección en unos comicios fraudulentos.
En este sentido, Guaidó ha lanzado reiterados llamamientos a los soldados para que permitan el ingreso de las ayudas y desobedezcan a Maduro, logrando hasta ahora que en una semana 567 miembros de la FANB desertaran, cruzando la frontera a Colombia.
Poco a poco, Guaidó ha ido ganando el respaldo de gremios, disidentes del chavismo, sindicatos e incluso instancias hasta ahora afectas al chavismo.
Agresión a indígenas
Gustavo Tarre, representante del gobierno de Juan Guaidó ante la Organización de los Estados Americanos (OEA), condenó ayer la represión chavista contra el pueblo indígena pemón.
Preguntado por la prensa sobre si se trata de un ataque sistemático, Tarre contestó: “Le dije que yo usaba el sustantivo genocidio con prudencia, y con cierto temor de no ser demasiado riguroso; pero si no es eso, se parece mucho”.