Tras medio año de reuniones, un comité público-privado terminó de definir un plan de negocio que contempla normalizar la circulación por el aire del coche Skydrive en un plazo de cinco años.
La primera prueba con un piloto humano tendrá lugar en verano de 2019, tras recibir el visto bueno del Gobierno nipón, que desde este año permite este tipo de test.
Unas 400 personas trabajan para la fabricación del coche volador Skydrive, que nació de las mentes de una decena de jóvenes ingenieros que invirtieron su tiempo libre en la creación de un nuevo sistema de movilidad aérea.