LONDRES (AFP, EFE). La Cámara de los Comunes aprobó ayer, por 317 votos a favor y 301 en contra, una enmienda no vinculante que pide al Gobierno renegociar con Bruselas una solución alternativa para la frontera entre Irlanda del Norte y la República de Irlanda, uno de los principales obstáculos que bloquean el proceso de ratificación.
“El gobierno redoblará ahora sus esfuerzos para obtener un acuerdo que esta cámara pueda respaldar”, aseguró la primera ministra May, quien había pedido un “mandato lo más claro posible” para reabrir la negociación con los líderes europeos.
La propuesta de May consiste en revisar por completo el punto más conflictivo del acuerdo estrepitosamente rechazado hace dos semanas: el denominado “backstop” , un dispositivo destinado a evitar una nueva frontera en la isla de Irlanda para preservar el acuerdo de paz del Viernes Santo, que en 1998 puso fin a tres décadas de sangrientos enfrentamientos entre católicos republicanos y protestantes unionistas.
Sin embargo, la batalla parece muy lejos de estar ganada y se abre la puerta para un diálogo de sordos.
Todos los beneficios, en un solo lugar Descubrí donde te conviene comprar hoy
El Consejo Europeo insistió en que el acuerdo del brexit consensuado entre Londres y Bruselas es “la mejor y única manera de asegurar una salida ordenada”.
“La salvaguarda irlandesa es parte del acuerdo de salida, y el acuerdo de salida no está abierto a la renegociación”, dijo un portavoz del presidente del Consejo, Donald Tusk, en un comunicado coordinado con los veintisiete Estados miembros que permanecerán en la UE tras la marcha británica.
Los Veintisiete sí se mostraron abiertos a hacer cambios en la declaración política sobre la futura relación con el Reino Unido y señalan que si las intenciones británicas para la asociación futura “evolucionasen”, la UE “estaría preparada para reconsiderar su oferta y ajustar el contenido y el nivel de ambición” de este documento, que no es vinculante.
La UE urgió además al Gobierno británico a “aclarar sus intenciones en cuanto a los próximos pasos a seguir lo antes posible”, después de que May confirmó su intención de volver a renegociar el acuerdo con Bruselas.
La idea de reabrir las negociaciones provocaba asimismo reacciones enfrentadas entre los manifestantes a favor y contra el brexit que se congregaban frente al parlamento.
