BRUSELAS (AFP). En declaraciones a los diarios The Times y Bild, el futuro mandatario estadounidense consideró una “buena decisión” la marcha de Reino Unido (RU) del bloque y pronosticó que “otros países dejarán” la Unión Europea (UE), según él, por la crisis migratoria.
Trump pronosticó también que el brexit será un “éxito” y anunció que se reunirá “muy rápidamente” con la primera ministra británica Theresa May; y calificó de “error catastrófico” la decisión de la canciller de Alemania, Angela Merkel, de acoger a los migrantes “ilegales”.
La respuesta de los europeos no se hizo esperar.
“La UE seguirá unida. Estoy 100% segura de ello”, dijo la jefa de la diplomacia comunitaria, Federica Mogherini, quien recordó que el Reino Unido no podrá negociar un acuerdo comercial con EE.UU. mientras sea miembro del bloque”, refutando así a Trump.
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Las declaraciones de Trump no solo preocupan fuera de EE.UU., sino también a la administración saliente de Barack Obama. Su embajador ante la UE, Anthony Gardner, ya advirtió de la “absoluta locura” que sería apoyar la “fragmentación de Europa”.
La inquietud de los europeos es mayor ante las críticas del magnate a una de sus garantías en materia de seguridad: la OTAN.
Trump calificó a ese organismo de “obsoleto”. De los 28 países, 22 son del bloque europeo, a los que el estadounidense reprochó por no pagar “lo que deberían”.
Las líneas de política exterior esbozadas por Trump también atacan dos puntos de la diplomacia europea: las sanciones contra la Rusia de Vladimir Putin, con quien mantiene una aparente cercanía, y el acuerdo con Teherán sobre su programa nuclear.
El presidente electo, que asumirá este viernes 20, aludió a la posibilidad de un acuerdo de reducción de armas nucleares a cambio de levantar las sanciones impuestas a Rusia por su papel en el conflicto en Ucrania.
Entretanto, China advirtió de nuevo que si Trump insiste en reforzar sus relaciones con Taiwán, considerada isla rebelde por Pekín, “se dará un tiro en el pie” y “se enfrentará a la oposición del gobierno y del pueblo chino, así como de la comunidad internacional”.