La justicia turca ordenó arrestar a 42 periodistas, pocas horas después de decretar prisión preventiva para 40 militares en Estambul.
Paralelamente y en un gesto a favor de la unidad poco habitual, Erdogan se reunió en el palacio presidencial con Kemal Kiliçdaroglu, líder de la formación CHP (social demócrata), principal partido de oposición.
Entre los periodistas sobre los que pesa una orden de detención se encuentra Nazli Ilicak, figura célebre en Turquía, despedida del diario progubernamental Sabah en 2013 por haber criticado a ministros corruptos.