PIRIBEBUY, Dpto. de Cordillera (Aldo Lezcano, enviado especial). Los animales faenados fueron descubiertos en la propiedad de Olga Ferreira, quien presta su terreno para pastaje de animales a los vecinos. Está ubicado a menos de 100 metros del ramal que conecta a Piribebuy con Paraguarí, a la altura del Kilómetro 84.
Según las especificaciones de las familias afectadas, dos vacas preñadas que fueron faenadas eran de propiedad de Ignacia Contrera (67). Otra, que también estaba gestante, y una vaquilla eran de Rafaela Escurra. El último animal robado es un torito que pertenece a Ignacia Caballero.
Según los datos, Rafaela Escurra fue para ordeñar sus vacas y se encontró con la ingrata sorpresa de cinco cráneos de bovinos, menudencias, tres teneros nonatos y una remera que dejaron los delincuentes.
Una vaca con cría estaba atada en el lugar, por lo que se presume que ya no tuvieron tiempo de faenarla. También hallaron rastros de que las viandas fueron alzadas en algún vehículo que ingresó al lugar mismo. Comentan que en menos de dos meses ya fueron faenados unos quince animales de los humildes lugareños.
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Los delincuentes generalmente dejan las menudencias y llevan con el cuero para agilizar el “trabajo”.
¿Justicia cómplice?
Según una fuente policial de Cordillera, la justicia es muy benevolente con los delincuentes.
Una red de abigeos estarían a cargo de un sujeto de nombre Federico Britos (36). Este cayó en diciembre pasado con 300 kilos de carne malhabida a bordo de una camioneta Ford Ranger de su propiedad.
La carne fue devuelta a su dueño y el marginal enviado a la cárcel de Emboscada el 1 de diciembre. Pero días después la jueza de Garantías de Caacupé, Blanca Báez, ordenó su libertad.