Allanan casas del guardia y cajero de banco asaltado

La Policía allanó ayer las casas del guardia de seguridad y del cajero de la boca de cobranzas del banco Sudameris que fue asaltada la semana pasada, cuando dos maleantes robaron más de G. 1.000 millones. Aunque no tienen aún indicios fuertes, los investigadores sostienen que fue una entrega.

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Los cateos simultáneos se llevaron a cabo ayer de mañana en las viviendas del cajero Celso David Cabañas Rolón, de 25 años, en el barrio San Pablo de Asunción, y del guardia de seguridad Joel Elías Riella Gracia, de 30 años, en el barrio Villa Anita de Ñemby.

Los operativos fueron ejecutados por policías de Investigaciones de Asunción y del departamento Contra Delitos Económicos, bajo la supervisión del fiscal Federico Leguizamón.

En ambos lugares los investigadores no hallaron evidencias relacionadas al robo, aunque los dos empleados siguen bajo la lupa en carácter de sospechosos de complicidad.

El millonario atraco se produjo el 24 de enero pasado, cuando dos delincuentes ingresaron a la boca de cobranzas del banco Sudameris que funciona en el predio del Sanatorio Bautista de Asunción, en Campos Cervera esquina avenida República Argentina.

Las sospechas de los policías se sustenta en que supuestamente el guardia fue al baño justo antes de que aparecieran los bandidos y después se habría dejado reducir con facilidad, aunque en la filmación se observa que los dos criminales le propinaron varios golpes.

Sobre el cajero, habría dejado abierta la bóveda de manera deliberada desde media hora antes del hecho, pese a que cuenta con un dispositivo de apertura con retardo automático, justamente para evitar que se abra fácilmente durante un asalto.

En el video se detecta también que solo uno de los maleantes portaba un arma, que en realidad sería una pistola de juguete.

El botín denunciado por el banco fue de G. 995 millones y US$ 10.000, que justamente era casi la capacidad máxima de la bóveda del local. El procedimiento usual era que cuando se juntaba semejante cantidad, la plata se transfería al cajero automático.

No se pidió la captura

Pese a los allanamientos de ayer, la Policía aclaró que contra el guardia y el cajero asaltados en la dependencia del banco Sudameris no existe orden de captura, porque la Fiscalía no pudo reunir aún suficientes elementos contra ellos.

El gerente del local, quien fue la tercera víctima, no está investigado porque al menos activó la alarma.

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