El Tribunal de Sentencia, presidido por Ramón Trinidad Zelaya e integrado por Benito González y Samuel Silvero, fijó los días jueves 2 y viernes 3 de junio para la reconstrucción de los hechos.
Ayer, el presidente del Tribunal comunicó que el acusado Rubén Villalba se quedará en la comisaría Quinta de Curuguaty y estableció como albergue provisorio para los otros diez acusados la subsede de la Gobernación de Curuguaty.
El viernes último se llevó a cabo el careo entre el comisario Miguel Anoni Paredes y Arnaldo Sanabria, a pedido de la defensa y la única diligencia que queda pendiente es el resultado de la pericia solicitada a la Policía española, de medición de la cadena de disparos.
“Es como la autopsia de los disparos producidos durante la masacre, relevantísimo para la defensa y nosotros, claramente va a darnos la prueba que durante la masacre fundamentalmente se utilizaron armas automáticas y disparos en ráfaga”, explicó el abogado Pablo Aguayo, defensor de Rubén Villalba.
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Una vez concluida la reconstrucción, se procederá a la presentación de los alegatos finales por parte del Ministerio Público, a cargo de los fiscales Nelson Ruiz, Liliana Alcaraz y Leonardi Ledesma.
Desalojo, muertes y juicio político
La masacre de Curuguaty, ocurrida el 15 de junio de 2012 durante un desalojo en Campos Morombí, dejó 17 muertos (seis policías y once campesinos) y desencadenó en el juicio político y la destitución del entonces presidente de la República Fernando Lugo.