Uno de los detenidos es Anderson Román Valdez (23 años), quien cuenta con documentos de identidad tanto paraguayos como brasileños y sería uno de los dos sicarios que participaron de un atentado registrado el 25 de octubre del año pasado en Asunción. En dicho ataque murieron el presunto narco William Giménez (sobrino político de Jarvis Chimenes Pavão) y su hijo de cinco años.
Los otros capturados en el procedimiento de ayer son el paraguayo Lucio Alberto Ovelar y el brasileño Dilmar Damacio Goncalvez, quienes también serían pistoleros al servicio del capomafioso Elton Leonel Rumich da Silva, alias Galán. En el lugar del procedimiento se levantaron varias evidencias como pistolas, cartuchos, elementos informáticos y varios celulares.
Igualmente, se incautaron de dos vehículos. Uno de ellos es una camioneta Fiat con matrícula BXS 998, que tenía orden de secuestro debido a que fue registrada a nombre de la firma RSS Internacional, que a su vez es una de las empresas de maletín que fueron creadas por “Galán” para el lavado de dinero proveniente del narcotráfico. Estas firmas fantasmas y un gigantesco esquema de lavado de dinero fueron desmantelados en marzo del 2016 por la Fiscalía y la Senad.
Atentados de la mafia
Todos los beneficios, en un solo lugar Descubrí donde te conviene comprar hoy
En la noche del 15 de junio del 2016, el propio “Galán” habría dirigido un atentado en pleno centro de Pedro Juan Caballero, en el que mataron con tiros de fusil calibre .50 a Jorge Rafaat Toumani, quien hasta ese momento era capo de la frontera y mantenía un control absoluto sobre el tráfico de drogas, armas y municiones hacia el Brasil.
El objetivo de “Galán” era tomar el lugar de Rafaat, sin embargo nunca pudo mantener el control en la región, pese a que se encargó de ordenar la muerte de todos los que formaban parte del esquema de su antecesor.
En marco de aquella lucha, un grupo de sicarios fue enviado a Asunción para eliminar a William Giménez, quien fue acribillado frente a su casa en el barrio Madame Lynch. Giménez resultó ileso del tiroteo, pero su hijo de cinco años que lo acompañaba fue alcanzado por las balas y falleció. Cuando el narco vio al niño muerto se suicidó de un balazo.
Tras el atentado, la Policía allanó una casa en el barrio Santa María de Asunción, donde capturaron a los sicarios Bruno Henrique Dos Reis de Oliveira, Diego Niz Pérez, Rony Maximiliano Román Ramírez, quienes participaron en le crimen. Mientras que Anderson Román Valdez logró escapar antes de la llegada de los agentes.