El tribunal de sentencia, integrado por los jueces Manuel Zelaya, Benito González y Víctor Godoy, admitió a casi 100 testigos propuestos por las defensas de los once acusados por la masacre.
Entre los testigos propuestos están los efectivos policiales de orden y seguridad de la zona, aunque algunos coinciden con los que ya declararon y fueron propuestos por el Ministerio Público, reconoció el juez Zelaya, presidente del tribunal.
Esta etapa del juzgamiento se extenderá bastante, teniendo en cuenta que poco más de veinte testigos ya prestaron declaración (todos efectivos policiales que participaron del violento desalojo) y todavía faltan que den sus versiones unas 230 personas.
Con el ritmo que lleva el juicio, se estima que recién a mediados de este año podría haber sentencia. Tras las testimoniales, serán presentadas las pruebas documentales y periciales, y luego se pasará a los alegatos finales, la deliberación y el fallo.
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Hasta ahora, los policías que intervinieron en el desalojo coincidieron en declarar que fueron emboscados. La comitiva encabezada por el subcomisario Erven Lovera (quien falleció allí), fue persuadida para acercarse para “dialogar”. Para ello utilizaron de “cebo” a mujeres y niños.
“Les manifestaron que solo venían a dialogar y después ya se produjo la balacera, nosotros todos cuerpo a tierra”, declaró la semana pasada el suboficial inspector Néstor Ramón Rojas, el testigo número 23.
Los fiscales que sustentan la acusación penal son Liliana Alcaraz, Juliana Giménez y Leonadi Guerrero, siendo este último designado tras la salida de Jalil Rachid, quien ya juró como viceministro de Seguridad.
El Ministerio Público acusó por homicidio doloso en grado de tentativa, invasión de inmueble ajeno y asociación criminal a: Rubén Villalba, Felipe Martínez, Luis Olmedo, Adalberto Castro, Arnaldo Quintana, Néstor Castro, Lucía Agüero, Fani Olmedo y Dolores López, mientras que Alcides Ramírez y Juan Tillería están acusados por invasión de inmueble y asociación criminal.
La masacre produjo el juicio político del entonces presidente Fernando Lugo y su destitución.