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El caso se inició en el 2008, cuando Blas Pereira, Carlos Villamayor, Arsenio Giménez, Carlos Sosa, Miguel Robles, Vladimir González, José Martínez, Celso Cabrera, Julio Silva, Édgar Serafini y Julio Ibarrola –todos administradores de varios puertos– fueron filmados trayendo maletines cargados con dinero supuestamente producto de coimas.
El entonces fiscal Arnaldo Guizzio acusó a todos los que aparecían en la filmación entregando el dinero del soborno agravado.
En el 2015 se hizo el primer juicio oral, y todos fueron absueltos debido a que había dudas de la comisión de los hechos delictivos. Sin embargo, ese primer juicio fue anulado.
Se llevó a cabo un segundo juicio, en que se extinguió la causa y se dispuso el sobreseimiento definitivo de los acusados. Ese fallo se dio en el 2016, pero la fiscala Yolanda Portillo, en su apelación, señaló que el plazo venció no por una cuestión de decidía del Ministerio Público, sino por las chicanas que iban presentando los diferentes acusados.
Ahora la Cámara de Apelaciones señala que no correspondía el sobreseimiento definitivo y que el fallo del tribunal de sentencia no tiene fundamentos suficientes para sostener lo resuelto, por lo que anuló el fallo y, por tercera vez, se tiene que realizar un juicio oral para los once acusados.