Poco antes de las 03:00, los delincuentes llegaron hasta el surtidor a bordo de un auto Funcargo azul, con matrícula BLS 206, se abastecieron de carburante y salieron del sitio.
Sin embargo, minutos después regresaron y se dirigieron a los dos empleados que a esa hora atendían en el lugar: Ignacio Cáceres (50) y Arnaldo Andrés Adorno (39). Ambos fueron reducidos a punta de armas y obligados a entregar todo el dinero que tenían, que era la recaudación de la noche anterior.
Los maleantes tomaron el dinero y escaparon de la gasolinera, pero a unos trescientos metros, los delincuentes se encontraron con un móvil policial que recorría la zona con las balizas prendidas. Ante esto, los delincuentes abandonaron el auto que según los uniformados había sido denunciado como robado el 27 de diciembre pasado en San Lorenzo, a más del arma y el uniforme para escapar a pie, según informaron.
