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Los abogados Guillermo Duarte y Felino Amarilla patrocinaron la denuncia que Cappello intentó ya en dos ocasiones y a través de sus influencias, sea desestimada, aunque sin éxito.
De acuerdo a los datos, Viradolce –la empresa de Maris Llorens– fue víctima de una megaestafa de G. 40.671 millones más US$ 582.125, entre el 2013 y 2015.
Por esta causa están acusadas la esposa de Turi Cappello, Silvia Noelia Giménez Gibbons, y la madre de esta, Anie V. Gibbons, exempleadas de confianza de la ganadera.
Según la denuncia penal contra Cappello, que fue presentada en agosto de 2016, el mismo habría cometido los hechos punibles de enriquecimiento ilícito, lavado de dinero y obstrucción a la restitución de bienes.
El actual representante del Ejecutivo ante la Conajzar (Comisión Nacional de Juegos de Azar), exconcejal municipal y exviceministro del Interior, adquirió acciones de una sociedad denominada EISA Paraguay, además de comprar siete inmuebles a través de esa firma y realizar la construcción de una lujosa mansión en la ciudad de Lambaré, que está valuada en nada menos que G. 6.387.500.000. Fue justo en el momento en que se perpetró la estafa a Viradolce, entre el 2014 y 2015.
Como antecedente, se tiene que otros familiares, entre ellos hijos de Anie Gibbons, colaboraron para ocultar los bienes despojados a Llorens, y fueron incluidos en el proceso penal.
Sin embargo y pese al crecimiento desmedido de su fortuna, Cappello resulta intocable y a través de sus influencias logró que en dos ocasiones, las fiscalas Fátima Capurro y Esmilda Álvarez pidieran la desestimación de esta denuncia, que no se concretó solo porque el juez Humberto Otazú dio trámite de oposición, con lo que la fiscala adjunta Gilda Villalba rectificó el pedido y ordenó que siga la pesquisa.
Su esposa y familia, acusados
En el proceso principal por la megaestafa contra la empresaria Maris Llorens, están acusados Silvia Noelia Giménez Gibbons, esposa de Jorge “Turi” Cappello; Diego Rubén Giménez Gibbons, Horacio Daniel Giménez Gibbons, hermanos de Silvia; al igual que Armando Ramón Gómez Arévalos, intendente de Lambaré, y Arnaldo David Paredes.
También están acusadas Annie Gibbons, suegra de Cappello; Fabiola Bareiro de Gómez (esposa de Armando Gómez) y Carmen López Sosa. En el proceso contra 13 agentes de cuentas de Itaú, la empresaria llegó a un acuerdo (cuyo contenido no trascendió) y fueron sobreseídos definitivamente por las autorizaciones de sobregiros de cuentas de Viradolce.