El operativo denominado “Canindeyú IV” fue efectuado por un grupo de 100 agentes de la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad), con el apoyo de dos helicópteros de la Fuerza Aérea, que operaban desde una base instalada en la ciudad de Curuguaty. La Policía Federal del Brasil también brindó apoyo logístico para la provisión de combustibles y alimentos del personal interviniente, señalaron.
Durante los días de trabajo los agentes antidrogas detectaron y destruyeron 290 hectáreas de cultivos de la “macoña”, diseminados en casi todos los sectores del departamento, en especial en la zona fronteriza con el Brasil y el amplio sector de la cordillera del Mbaracayú.
De acuerdo a los agentes especiales, otro sector donde se detectaron enormes parcelas de cultivos de la “macoña” está comprendido entre las localidades de Brítez Cue e Yby Pytã.
En estas áreas los cultivos estaban conectados por amplios senderos que conducen a los campamentos utilizados por los narcos como depósitos y lugar de procesamiento de la droga cosechada. Durante este operativo también fueron destruidos 300 kilos de semillas, distribuidas en bolsas, listas para el próximo cultivo.
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Según los agentes especiales el cultivo de la droga en Canindeyú disminuyó sensiblemente a raíz de los reiterados procedimientos efectuados en la zona durante todo el año.
Sin embargo, la gran demanda del producto en el Brasil y el poder económico de los financistas hacen que la producción de la “macoña” se mantenga. Por ello, los organismos de seguridad, tanto de nuestro país como del Brasil, prevén operativos más fuertes para el próximo año en Canindeyú.
El objetivo será neutralizar a los financistas y al mismo tiempo mantener un estricto control en la frontera para evitar el paso de la droga, señalaron.