Drogadicto apuñaló y dejó morir a su padre porque no le abrieron la puerta

Este artículo tiene 8 años de antigüedad
/pf/resources/images/abc-placeholder.png?d=2393

Un joven con antecedentes por violencia doméstica apuñaló y dejó morir desangrado a su propio padre, simplemente porque este le reclamó que llegara tarde y drogado a la casa y porque no le abrió rápido la puerta.

El parricidio ocurrió ayer aproximadamente a las 02:30 en una casa del barrio Capellanía de San Lorenzo.

La víctima fatal es Ricardo Cabrera, de 48 años, en tanto que el autor del crimen fue su hijo Sergio Damián Cabrera Mendieta, de 24 años.

Este último ya había estado preso por violencia familiar y andaba con libertad ambulatoria para seguir un tratamiento por la adicción a las drogas, según los registros policiales.

Policías de la comisaría 15ª Central de Barcequillo relataron, con base en el testimonio de los familiares de los involucrados, que el joven llegó totalmente drogado a la vivienda y con una herida en su brazo, aparentemente producida con un arma blanca.

Todos los beneficios, en un solo lugar Descubrí donde te conviene comprar hoy

Sergio golpeó varias veces la puerta pidiendo que sus padres o hermanos le abrieran, hasta que Ricardo se levantó de la cama.

El padre de familia le reclamó a su hijo que llegara en ese estado y además herido, lo que a su vez desató la furia del joven adicto, quien se descontroló completamente.

Ene se momento, el joven de 24 años inició una pelea, que su padre intentó desactivar, persuadiéndolo de que fuera a acostarse.

Antes que obedecer, el joven sacó un puñal y le aplicó una profunda herida a su padre en el muslo izquierdo.

La herida afectó una arteria importante, por lo que el dueño de casa cayó malherido y empezó a desangrarse.

Ante esta situación, los demás familiares llamaron a la Policía, que envió una patrullera para auxiliar a la víctima, y después otra para aprehender al responsable.

Los efectivos de la comisaría 15ª indicaron que Ricardo Cabrera llegó ya casi sin vida al hospital de Calle’i, donde finalmente fue declarado muerto.

El adicto, en cambio, también fue socorrido hasta un nosocomio, debido a la herida que tenía antes de matar a su padre, y después quedó a cargo de la Fiscalía.