Por unanimidad, el tribunal de sentencia integrado por Juan Carlos Zárate, Esther Fleitas y Gustavo Santander, condenó a 20 años de prisión a los reclusos Jorge Abel Pereira y a Feliciano López López.
Acerca de la perpetración de la violación los jueces no tuvieron dudas. Hubo sobreabundancia de pruebas que demostraron que Pereira y López cometieron el abuso del que fueron víctimas dos hermanas adolescentes, que entonces tenían 15 y 17 años de edad.
Los videos que los mismos reclusos filmaron para su posterior comercialización, fueron exhibidos a puertas cerradas durante el juicio oral. Se vio la manera en que ambos abusaron de manera salvaje.
Antes de cometer el abuso sexual, los reclusos se aprovecharon del estado de inconsciencia de las menores, ya que previamente las habían alcoholizado.
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No existen elementos a favor de Pereira y de López que haga atenuar la pena de 20 años de cárcel. Más bien, todos los hechos son considerados agravantes, indicó el tribunal.
Medidas de seguridad
Es la primera vez que por un caso de pornografía y violación son aplicadas las medidas de seguridad, debido a la peligrosidad de los ahora condenados, y de que pueden volver a cometer los hechos punibles.
El colegiado indicó que además de la pena de 20 años, los 10 años de medida de seguridad es para proteger a la sociedad de potenciales delincuentes. Durante este tiempo deben realizar tratamientos para reintegrarse a la sociedad.
El juez Santander (disidente) votó por no imponer las medidas de seguridad. Explicó que esta medida es inconstitucional, porque se constituye en una doble pena. Además, no existe un reclusorio que deba ser destinado para el cumplimiento de las medidas de seguridad, como ordena la ley.
La fiscala Teresa Martínez quedó conforme con la sentencia condenatoria.
Antecedentes del caso
- La violación de dos hermanas de 15 y 17 años se perpetró en junio de 2010, en el Pabellón Libertad, de Tacumbú, que tiene régimen semiabierto. Pereira y López eran miembros de la Iglesia Libertad, de los menonitas. Pereira contactó a través del Orkut con las menores. Disponía de internet porque era el coordinador de un curso a distancia con la Universidad Autónoma de Asunción. Pereira y López (condenados a 24 y 25 años de cárcel por homicidio) amenazaron con matar a los familiares de las víctimas si no accedían a sus pedidos.