El abogado Domingo Guzmán Martínez dio su exposición en audiencia pública en idioma guaraní. Dijo que la independencia del Poder Judicial está en manos de los consejeros que están encargados de conformar las ternas para ministro de Corte. Indicó que deben elegir a los más capaces, o de lo contrario todo seguirá igual. Agregó que el trabajo de los facilitadores judiciales es importante porque impiden que muchas causas se judicialicen. El camarista Arnaldo Martínez Prieto se preocupó por el acceso a la justicia de parte de las personas con discapacidad. Cuestionó la falta de coraje de los magistrados que se inhiben en cadena para no resolver causas conflictivas.
Martínez Prieto fue muy cuestionado por el público por el fallo que absolvió a los condenados del caso Curuguaty, pero tiró la culpa al Ministerio Público por realizar un trabajo deficiente que no pudo demostrar quienes realizaron los dispararon mortales entre campesinos y policías. Sostuvo que los procesados ya compurgaron los demás delitos de coacción grave, resistencia, invasión de inmueble ajeno y asociación criminal.
También fue objetado por dedicarse al comercio en alusión a que está al frente de una universidad privada. El camarista respondió que tiene por actividad principal la docencia.
Por su parte, el también camarista Alberto Martínez Simón reconoció que el Poder Judicial tiene una gran deuda porque según los últimos datos, la justicia solamente tiene 40% de aceptación por parte de la ciudadanía. Fue un férreo defensor de la implementación del expediente electrónico porque además de agilizar los trámites procesales, también hace que disminuya la corrupción y la mora en los tribunales. El público le cuestionó que como masón benefició a sus “hermanos de logia”. Respondió dando un ejemplo en que condenó a la ejecución de demanda contra una logia.
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La igualmente camarista Alma Méndez de Buongermini afirmó que la corrupción en los tribunales se erradicará con la optimización y racionalización de los recursos y la transparencia de gestión a través de audiencias públicas, la rendición de cuentas, entre otros elementos. La capacitación de los funcionarios y el castigo a los corruptos, son igualmente fundamentales.
Reconoció que el servicio del Poder Judicial es deficiente y que los magistrados deben asumir el compromiso para recuperar la confianza de la ciudadanía. Afirmó que la paz social en está en manos de la justicia.