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El 4 de enero pasado, Juan Carlos Gómez García, de 38 años, quien gana el sustento diario como cuidacoches en Mayor Bullo y José Asunción Flores, fue detenido en la vía pública. Los policías que lo abordaron lo confundieron con su hermano Ricardo Gómez García, quien entonces tenía orden de prisión por tentativa de hurto.
“Me dijeron que yo era Rafael; se confundieron. Yo no tenía mi cédula y por eso justamente me agarraron, estaba lejos de mi casa”, trató de explicar Juan Carlos, pero la verdad es que lo ocurrido no tiene explicación.
Sin tener proceso ni antecedentes, Juan Carlos, casado, padre de un adolescente, se vio esposado, rumbo a la cárcel de Emboscada, donde permaneció recluido nada menos de cinco meses.
El abogado Roberto Daniel Viveros, de la Asociación Caminos de Libertad, se enteró de su caso mediante un relevamiento que hace la entidad de los casos de reos de escasos recursos.
Al solicitar la libertad a la jueza María Elena Cañete, la magistrada aclaró que no podía liberarlo porque nunca ordenó su prisión, sino la de su hermano. Así las cosas, la vía elegida para reparar el error fue la del habeas corpus. “Es una detención ilegítima e irregular. En la mañana de hoy (ayer) nos enviaron el prontuario de él y de su hermano y con las fotos ampliadas para demostrar que realmente se trata de dos personas diferentes. El hermano hace tiempo ya salió en libertad y él seguía privado de su libertad, sin tener una causa abierta en su contra”, afirmó el juez Óscar Delgado, quien lo liberó, previa solicitud de informes a la Policía Nacional y al Ministerio Público.