Los fallecidos fueron Adrián Leiva (26), oriundo del distrito de Hernandarias, y Jhoseir da Silva Lima (26), quien residía en Pedro Juan Caballero. El primero de los citados expiró el jueves de tarde y el segundo en la tarde de ayer.
El tercero de los que habían sido alcanzados por el fuego y que fue el autor del hecho, Francisco Javier Fernández, fue dado de alta en el mismo día y ya se encuentra fuera de peligro.
El director del citado penal regional, Blas Martínez, manifestó que recibió el informe médico que refiere que las dos víctimas perdieron la vida principalmente por efectos de la inhalación del humo tóxico, que afectó sus pulmones y otros órganos vitales, antes que a causa de las graves quemaduras que tuvieron en sus cuerpos.
Martínez refirió que los tres reclusos afectados eran adictos a drogas y que como consecuencia de eso ya padecían serios problemas de salud, que sumados al incidente del incendio hicieron que no pudieran soportar esa condición. El autor confeso del hecho fue trasladado a la penitenciaria nacional de Tacumbú, Asunción.
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Dos días después de que sucediera aquel percance, el 31 de mayo último, se produjo un motín en la misma cárcel ovetense, ocasión en que los presos quemaron mesas y colchones. El hecho causó heridas a cinco personas, dos reclusos y tres guardianes. Los demás no sufrieron heridas. Por un momento el humo había tomado todo un sector de la prisión.
