Fiscales encontraron 22 celdas de lujo en la penitenciaría de Tacumbú

Las celdas encontradas se diferencian de las demás reparticiones comunes que forman parte de prisión, indicó la fiscala Pamela Pérez.

Cada una de esas dependencias carcelarias observadas “tienen baños privados, se diferencian mucho de las otras”, refirió la citada representante del Ministerio Público.

“Vamos a pedir informes y todos los datos necesarios”, agregó la fiscala. Señaló que no podía adelantar las diligencias que prevén en torno a la confirmación de la existencia de esas más de veinte celdas lujosas.

Cuando se le preguntó al fiscal Cáceres si indagaron sobre los precios que pagan los reos por cada una de aquellas piezas “diferenciadas” habilitadas en la prisión, el agente del Ministerio Público dijo que “eso formará parte de nuestra labor investigativa”.

El agente fiscal aseguró, sin embargo, que en las celdas vip ya no se encuentran alojados los internos ya que “todas están vacías”.

Para la diligencia se movilizó a arquitectos y técnicos del laboratorio forense del Ministerio Público, indicaron los intervinientes.

“Se realizó un trabajo minucioso, se labraron actas y ahora comienza la investigación”, agregó Cáceres.

“Ahora vamos a analizar eso”, respondió el fiscal al ser preguntado si tiene previsto llamar a declarar a Jarvis Chimenes Pavão, el condenado narcotraficante brasileño sindicado como uno de los financistas de las celdas vip en Tacumbú.

Dijeron que la constitución fue posible ante una solicitud que recibió el Ministerio Público por parte de representantes del Ministerio de Justicia.

Igor Cáceres y Pamela Pérez fueron seleccionados por el fiscal general del Estado, Javier Díaz Verón, para investigar los supuestos privilegios de presos en la citada mayor cárcel del país.

Según los antecedentes, son dos las denuncias por privilegios concedidos a poderosos criminales presos en Tacumbú.

La primera revelación había sido formulada por la exministra de Justicia Sheila Abed, en el año 2015, mientras que la segunda fue efectuada por el encargado de despacho de esa cartera de Estado, Éver Martínez. La celda de Pavão estaba situada sobre la oficina donde funciona la Dirección de la Penitenciaría Nacional y a la misma accedían hasta modelos en horas de la noche y fines de semana, según denuncias.