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Durante la noche del viernes último y la jornada de ayer la Fuerza de Tarea Conunta (FTC) continuó efectuando incursiones, sobrevuelos y controles permanentes en accesos a las comunidades rurales, colindantes con la zona de enfrentamiento con el grupo armado autodenominado Ejército del Mariscal López (EML) que lidera Alejandro Ramos Morel.
Los procedimientos se realizan bajo la presión ciudadana que cada vez deposita menos credibilidad a los organismos de seguridad y, por tanto, les urge algún resultado para recuperarla.
Según la versión oficial, se produjo en la tarde del viernes último, en Arroyito, departamento de Concepción, un “enfrentamiento sostenido” entre la FTC e integrantes del EML. Los criminales, sin embargo, huyeron en medio de la balacera y la fuerza de seguridad llegó hasta un campamento de la banda.
Entre los elementos confiscados en el lugar figuran armas de fuego, víveres, panfletos con fines extorsivos y un libro de novedades en el que el grupo transcribe detalladamente sus “actividades” desde setiembre del año pasado hasta el miércoles último.
Los fiscales Federico Delfino, Joel Cazal y Carlomagno II Alvarenga trabajan en el análisis de los incautados junto con peritos y agentes policiales de Inteligencia y Antisecuestro.
En el cuaderno aparecen con sobrenombre las personas que ya dejaron de pertenecer al grupo armado pero que siguen activando en forma individual, incluso en la extorsión a ganaderos. También hace referencia al enfrentamiento con la FTC registrado el pasado 7 de abril, que dejó dos heridos.
También según datos a los que accedió ABC Color, menciona al secuestrado Félix Urbieta Ramírez, comentando que la familia llamó a una conferencia de prensa para expresar que están abiertas a las negociaciones, lo que tildan de “ridículo”.