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SAN ANTONIO (Higinio R. Ruiz Díaz, corresponsal).El percance sucedió cerca de las 22:00 del sábado cuando dos personas llegaron a la sede policial y una de ellas en forma prepotente se presentó como hijo del jefe policial, pero llamativamente se negó a mostrar su documento, y el otro dijo ser el suegro de Críspulo Sotelo.
Los hombres presionaron al oficial inspector Darío Ledesma para cambiar el acta policial para favorecer a un motociclista identificado como Isabelino Fleitas Martínez (53), quien protagonizó el accidente de tránsito. El mismo no contaba con registro ni habilitación del biciclo, tampoco contaba con casco o chaleco reflectivo.
Pero el uniformado se negó a la petición del que se presentó como hijo del comandante y advirtió que todo el procedimiento ya fue informado a la fiscalía. Esto habría ofuscado más a Sotelo hijo, quien llamó al jefe de policía de Central, Crio. Édgar Caballero. Este policía, a su vez, inmediatamente ordenó al oficial a presentarse a la jefatura.
El accidente que motivó dicha situación ocurrió cerca de las 17:30 del citado día sobre la avenida principal del barrio San Jorge.
Fleitas Martínez, a bordo de una motocicleta Kenton sin chapa habría salido sin tomar precauciones a la avenida principal. En ese lugar fue embestido por una camioneta Nissan Terrano, con chapa BAT 909, guiada por José Gómez (59). El accidente ocasionó fracturas a Fleitas.
“Nosotros ya habíamos llegado a un acuerdo con la víctima, pese a que él salió en forma repentina a la avenida en donde -yo- tenía preferencial y luego llegaron supuestamente el hijo del comandante y su suegro y empezaron a maltratar al personal policial que solo hizo su trabajo”, expresó Gómez, quien fue testigo del atropello de parte de Sotelo.
Preguntamos al oficial Lezcano lo que pasó y respondió que solo hizo su trabajo como policía. Añadió que fue convocado por el jefe policial y el director de la zona, sin entrar en detalles.
Consultamos sobre lo ocurrido al ministro del Interior Francisco de Vargas y solo se limitó a decir que si era cierto constituye un hecho grave, por lo que sugirió hablar con el comandante. Intentamos comunicarnos con Sotelo y el jefe de Central, pero no atendieron las llamadas.
Los vecinos del puesto policial que presenciaron el hecho lamentaron que un civil tenga que ordenar a un alto jefe policial a castigar a un personal policial que solo cumplió con su deber. Anuncian manifestaciones a favor del uniformado.