La conferencia de prensa, llevada a cabo en la sede del departamento Contra Delitos Económicos y Financieros de la Policía, que parecía iba a ser reveladora sobre los avances en la pesquisa del túnel descubierto debajo de la antigua bóveda del banco Continental del microcentro capitalino, al final evidenció la desorientación de los investigadores encargados de identificar a los “topos”.
El titular de la citada unidad, comisario principal Abel Cañete, reiteró que el salón de la planta baja del edificio 15 de Agosto, ubicado en 15 de Agosto casi Presidente Franco y desde donde se inició la excavación subterránea, fue alquilado a nombre de la señora Rosa Estela Samudio García, hace ocho meses, pero el que usualmente pagaba el alquiler, hasta hace tres meses, era un tal Félix Javier Pérez Delgado.
Sin embargo, ahora quedó demostrado que la banda usurpó las identidades de ambas personas, que viven en realidad en María Auxiliadora y Pilar, respectivamente, y quienes ya se pusieron a disposición para colaborar en la causa.
“Pedimos a todas las personas que cooperen con nosotros para llegar a identificar a estas personas”, declaró el comisario Cañete, pero después dijo que “por el momento no se van a dar a conocer los rostros de estas personas, por seguridad y procedimiento”.
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Más tarde, al ser consultado cómo la gente podría entonces identificar a los responsables si no se exhiben sus fotografías, el comisario trasladó la responsabilidad al fiscal de la causa, Ángel Ramírez, quien fue supuestamente el que prohibió que se socializara la información que podría ayudar a desbaratar la banda.
El fiscal dijo que esto se consensuó con el comisario
Dos excavaciones
El primer túnel, de dos metros de profundidad y 40 metros de extensión, fue descubierto en la madrugada del sábado último, debajo del subsuelo de la sucursal del banco Continental, situado en Estrella casi 15 de Agosto, donde antes funcionaba la bóveda.
Desde ahí, los “topos” se ahorraron otros 180 metros de excavaciones, al utilizar el ducto de alcantarilla subterráneo de la ciudad, por el cual llegaban hasta frente al edificio 15 de Agosto. Desde este punto hicieron el segundo túnel, de 15 metros de largo y un metro de profundidad, hasta el salón que alquilaban en la planta baja.