Juicio oral por desviar fondos

El juez penal Miguel Tadeo Fernández ordenó ayer que dos procesados por el desvío de fondos de Senavitat enfrenten juicio oral y público en el caso “viviendas fantasma”. El magistrado rechazó de las defensas un pedido de procedimiento abreviado y un sobreseimiento definitivo. El perjuicio es de G. 12.000 millones.

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Enfrentará juicio oral Camilo Recalde, quien en su función de encargado del Servicio de Asistencia Técnica (SAT), dolosamente habría perpetrado el desvío de la totalidad del dinero que le entregó la Senavitat para construir 321 viviendas en 12 proyectos, en diferentes localidades del departamento Central, para depositar a una cuenta de la Cooperativa Mi Casita, cuya presidenta era la también acusada Carol Turrini.

El desvío de fondos se produjo durante el 2013 bajo la presidencia del exministro interino de Senavitat, Hugo José Núñez, desvinculado del proceso penal.

En la audiencia preliminar, Recalde ofreció dos inmuebles para “reparar el daño”, pero estos bienes no estaban tasados ni se cuantificó el perjuicio que le correspondía reponer al acusado, por lo que fue rechazado el procedimiento abreviado que tenía como objetivo condenarlo a solo 2 años de prisión, pero con suspensión de la ejecución de la pena. La fiscala Nadine Portillo se allanó al pedido de Recalde en la preliminar.

El juez Fernández rechazó igualmente el pedido de sobreseimiento definitivo que planteó Rufino Concepción González, exdirector general de Administración y Finanzas de Senavitat, y deberá asimismo enfrentar juicio oral donde se determinará su responsabilidad en el desvío de fondos. Fue quien autorizó los desembolsos de fondos.

El 28 de noviembre enfrentarán audiencia preliminar Turrini, Carlos Valenzuela, Óscar Barreto y Hugo Acevedo.

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