La víctimas fueron identificadas como Lucas Ramón Barrios Godoy (61), quien sufrió cuatro impactos de bala calibre 38, y su esposa Juana Francisca Ferreira (53). La mujer acusó un balazo del mismo calibre en el abdomen, lo que le causó la muerte en cuestión de segundos. En tanto que los dos hijos adolescentes de la pareja, de 12 y 16 años resultaron ilesos, solo por la mala puntería del criminal, quien al quedarse sin balas se vio obligado a escapar del lugar, informaron.
De acuerdo al relato de uno de los sobrevivientes, alrededor de las 22:00 del lunes, cuando todos los ocupantes de la casa ya estaban acostados, una persona tocó la puerta. Barrios se levantó y abrió pensando que se trataba de un familiar, pero en ese momento un hombre alto y con la cara cubierta con una máscara le disparó a quemarropa cuatro tiros: la víctima cayó muerta. Luego el desconocido irrumpió en la habitación donde mató de un tiro a la mujer.
En medio de los disparos y gritos de auxilio, uno de los hijos de la pareja se encontró frente a frente con el criminal, quien le disparó a la altura de la cabeza, pero falló el tiro y nuevamente el intruso gatilló contra los niños, pero para ese momento ya se había quedado sin balas.
Tras esto, el desconocido salió al patio y ante la posibilidad de la reacción de algunos vecinos, escapó del lugar con las manos vacías.
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De acuerdo a los allegados, el objetivo del criminal aparentemente fue una suma de dinero, producto de la venta de una vaca, que las víctimas tenían guardada en la casa. Sin embargo, la Policía no descarta que se haya tratado de una venganza por alguna denuncia contra abigeos que realizaron, inclusive sospechan que el maleante pensaba quemar la casa tras la matanza.