Resultó víctima José María Rivero Clivi (29), un joven que trabaja como empleado en un call center de la capital del país.
El infortunado acusó un impacto de bala en el muslo izquierdo, al ser asaltado por dos hombres que se movilizaban en una motocicleta tipo urbana de color oscuro y sin chapa. El conductor tenía puesto el casco de seguridad, mientras que su acompañante actuó a cara descubierta, según datos de la comisaría 3ª Metropolitana.
De acuerdo con las fuentes consultadas, Rivero regresaba a pie a su domicilio, cuando al tocar la puerta de la casa, cerca de las 19:45, aparecieron los delincuentes a bordo de una motocicleta que ingresó a contramano por Iturbe.
De repente el que iba de acompañante sacó un arma de fuego y sin mediar palabras le disparó en la pierna izquierda de la víctima, quien cayó al suelo gravemente herido. Seguidamente, le despojaron de su teléfono celular -de la marca Necken W63 de color anaranjado con negro- para finalmente darse a la fuga.
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Un primo de la víctima, identificado como Luigi Piñol, relató que cuando escucharon el disparo se asustaron y no abrieron la puerta hasta que los motoasaltantes se fueran. Cuando lo hicieron, encontraron a Rivero tendido en la vereda, con la pierna ensangrentada y gimiendo de dolor.
Llamaron al Sistema 911 y minutos después apareció una patrullera de la comisaría 3ª Metropolitana, que auxilió al herido y lo trasladó hasta el Hospital del Trauma (ex Emergencias Médicas), donde anoche permanecía internado.
Inseguridad galopante
Luigi Piñol lanzó duras críticas contra la inoperancia de las autoridades nacionales, principalmente de la Policía Nacional, para hacer frente a la ola de inseguridad que impera en las calles de la capital y de otras ciudades.
Impotente, el joven expresó la posibilidad de “hacer justicia por manos propias” ante este tipo de hechos delictivos y la violencia reinante “porque la Policía Nacional y el Estado nada hacen”.