Ana Romina Zanotti Cavazzoni dio a luz a las 07:20 de ayer una niña y a un varón en un hospital privado de nuestra capital. Los recién nacidos recibieron los nombres de Milagros y Antonio.
“Mi señora y yo podemos decir que Dios existe y Dios es grande. Después de todo lo que pasó, ahora estamos respirando nuevamente”, expresó Miguel Paredes, el dichoso padre de los mellizos.
Los recién nacidos y su madre gozan de muy buena salud y están rodeados de una alegría inmensa.
“Realmente es una bendición muy grande para nosotros después de todo lo que pasamos”, afirmó Paredes.
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Según relató el padre, Vivian siempre les pedía un hermanito y hoy, gracias a ella, lograron ser padres nuevamente.
“Solo pedía a Dios que nos dé una oportunidad de ser padres otra vez, porque nos quitaron a la persona que yo más amo en la vida. Ese dolor nunca se me va a terminar; es eterno para mí”, manifestó.
Paredes, quien es oficial de la Policía Nacional, recordó el dolor inmenso que sintió cuando perdió a su hija de tres años durante un extraño procedimiento erróneo llevado a cabo por agentes de la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad) en una propiedad de Nueva Italia.
“Creo que nosotros no nos merecíamos esa tragedia. Mi hija no merecía terminar así. Inadaptados nos quitaron a nuestra pequeña”, lamentó.
El proceso iniciado contra los agentes de la Senad por la muerte de la pequeña Vivian continúa estancando debido a que aún no se realizó la audiencia preliminar.