Lorena Delvalle y su concubino Anderson Ríos fueron imputados por el fiscal de Pedro Juan Caballero Martín Areco por los delitos de tentativa de homicidio, lesión grave, coacción sexual y coacción.
A su vez, las fiscalas Teresa Martínez y María Isabel Arnold, de la unidad especializada de Trata de Personas que tiene jurisdicción nacional, imputaron a la pareja por explotación infantil.
Inclusive como Delvalle y Ríos estaban prófugos, el fiscal Areco impartió orden de captura internacional. Ante esta situación, el juez Ramírez dispuso el estado de rebeldía de la pareja para interrumpir los plazos procesales.
Sin embargo, días después revió esta decisión a pedido de la defensa, pese a que ambos imputados seguían prófugos.
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Inclusive fijó para el 5 de junio la audiencia de imposición de medidas, tras la cual el magistrado debe resolver si ambos van a prisión u obtienen medida sustitutiva a la prisión. La defensa le prometió que ambos se presentarán.
El fiscal Areco apeló la resolución, con el fundamento de que no se podía levantar la rebeldía, cuando aún los imputados estaban prófugos de la Justicia.
¨Pero la Cámara de Apelaciones con los votos de Cano y Maciel, con la disidencia de Luis Benítez, rechazó el requerimiento del Ministerio Público.
También las fiscalas de la unidad de Trata de Personas apelaron y obtuvieron igual respuesta por parte de la Cámara.
Lo llamativo de todo es que la pareja está imputada por delitos que son considerados crímenes y que según nuestra ley procesal penal, no admite medida sustitutiva a la prisión.
Y si bien el juzgado aún no se expidió sobre ese punto, dio vía libre a que ambos sigan en libertad, pese a los cargos que soportan, al fijar la audiencia recién para el 5 de junio.
A esto se suma que tanto el juzgado de primera instancia como la Cámara, les permitió litigar cuando aún seguían en estado de rebeldía.
Debido a esto el fiscal Areco convocó a los procesados a prestar declaración indagatoria. Lorena Delvalle acudió el pasado viernes acompañada de la abogada Miriam Mendoza. Tras declarar fue liberada. Pero Anderson Ríos, aparentemente al recibir la información de que hasta la fiscalía habían llegado policías para detenerlo, optó por no presentarse y pedir la suspensión de la audiencia.