CIUDAD DEL ESTE (Mariana Ladaga, de nuestra redacción regional). La rosca mafiosa fue revelada, casi sin querer, por el suboficial principal Marco Antonio Verdún Jara, quien hasta el miércoles último era el jefe de la subcomisaría 48ª de la colonia Nueva Conquista, en cuya jurisdicción existen las mayores plantaciones de marihuana.
El principal acopiador de la “macoña” en la zona sería un brasileño fugitivo desde 2013, que a su vez envía la droga al grupo criminal PCC.
El caso se conoció a través de un audio de una discusión que mantuvo Verdún con su reemplazante, el suboficial principal Manuel Cantero Casco, a quien acusó de conspirar en su contra para quedarse con el cargo y así administrar el dinero que los narcotraficantes de la zona pagaban mensualmente para no ser molestados.
En el audio, Verdún menciona al propio comandante de la Policía, Luis Rojas, de quien dice es su pariente político e insinúa una protección de este.
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También afirma haber hablado con el subcomandante, Bartolomé Báez López, quien supuestamente le prometió que lo nombrarían en otro “buen lugar”.
Igualmente, el suboficial manifiesta su disgusto contra el ahora ya destituido jefe de Policía de Alto Paraná, Manuel Sosa, porque supuestamente le cobró G. 4 millones para mantenerlo en la subcomisaría, pero al final ordenó su cambio.
Verdún nombra igualmente en el audio al anterior jefe de Policía, Juan Fernández (quien estuvo antes de Manuel Sosa), así como a un jefe de Investigaciones y a un jefe de Antinarcóticos (cuyos nombres deben ser confirmados por los investigadores), a quienes supuestamente entregó recientemente G. 50 millones a cada uno, presuntamente de parte de los marihuaneros.
Verdún, quien en el audio admite haberse quedado con otros G. 45 millones, hizo las trascendentales revelaciones a su camarada Cantero supuestamente porque tocaron su dignidad.
Denuncia y operativo
Tras la viralización del audio, el encargado de despacho del ministerio del Interior, Lorenzo Lezcano, ordenó al comando de la Policía Nacional que presentara una denuncia formal y la causa recayó en la unidad del fiscal de Minga Porã, Víctor Adolfo Santander.
Paralelamente, la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad) intervino la región de Itakyry por agua y aire, en un operativo en el que se destruyeron seis hectáreas de plantaciones, se detectaron 19 campamentos narcos y se incautaron 18 toneladas de marihuana, entre picada y prensada. Este último procedimiento fue avalado por el fiscal antidrogas Manuel Rojas.
La posibilidad que surge ahora es que ambas causas, tanto la del esquema de coimas revelado por el suboficial Verdún así como la del hallazgo de las plantaciones y campamentos, sean unificadas para tener un solo frente de investigación en este feroz escándalo.