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El violento atraco se inició aproximadamente a las 08:00 en la playa de venta de vehículos Unión Cars SRL, que tiene dos entradas, una sobre la avenida Santísimo Sacramento, por donde entraron dos de los asaltantes, y la otra sobre la calle Itapúa, por donde ingresó uno de los criminales. El cuarto integrante de la banda se quedó afuera esperando en un coche listo para la fuga.
Los malvivientes, armados con pistolas y revólveres, redujeron a golpes al dueño del negocio, a dos empleados y a un sereno.
Los rehenes fueron reunidos en una oficina, mientras con mucha violencia los delincuentes pedían el dinero que había. En total, los criminales llegaron a juntar poco más de G. 4 millones.
Ni cinco minutos después de que se iniciara el asalto, irrumpieron sorpresivamente en la playa al menos una veintena de policías vestidos de civil y también fuertemente armados, pertenecientes a la división de Investigación de Delitos del departamento Central, también conocida como Brigada Central.
El jefe de esta unidad, comisario principal Rubén Paredes, explicó que ya venían siguiendo las pistas de este grupo y que, tras obtener informes de que planeaban un nuevo golpe, intensificaron la investigación y supieron de la acción de los maleantes.
“Sabíamos que iba a ser un operativo de alto riesgo y teníamos miedo de que otras personas resultaran dañadas, pero sorprendimos a estos asaltantes, liberamos a los rehenes, recuperamos todo el dinero y nadie resultó herido”, declaró.
Los capturados
Los tres sospechosos, inicialmente, se atrincheraron con los cuatro rehenes, pero al verse rebasados optaron por deponer las armas.
El líder de la gavilla resultó ser el expolicía Oscar Daniel Duarte Villalba, de 35 años, quien registra 14 procesos en su prontuario.
Este había sido dado de baja en 2007, tras un asalto a un surtidor de Lambaré, y dos años después mantuvo de rehén por casi una hora a una psicóloga que lo iba a entrevistar en la cárcel de Tacumbú.
Otro de los arrestados fue el conocido exconvicto Elvio Pablo Segovia Cartamán, de 44 años, quien tiene nueve antecedentes por robo a mano armada, homicidio, coacción sexual y hurto agravado.
El tercer integrante de la gavilla que ingresó a la playa fue Oliver David Colmán Medina, de 20 años, sin antecedentes y reclutado por el expolicía.
El chofer del grupo fue identificado como Diego Orlando Mendoza Cabral, de 25 años, quien dijo ser un exjugador de Guaraní y que iba a cobrar G. 10 millones por transportar a los maleantes tras el golpe. Este último esperaba en un auto Toyota Corolla gris, con chapa BRC 905, dentro del cual fue recuperado un fusil.
Otro golpe similar
Esta sería la misma banda que el 25 de enero pasado baleó en la cabeza al también vendedor de vehículos Arturo Mendoza Villalba, de 48 años, en un asalto en la zona del Hospital de Trauma.