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En el lugar estaban montados varios campamentos, donde elaboraba gran cantidad de la droga. Los intervinientes llegaron a encontrar, pesar y quemar doce toneladas de marihuana en panes y semillas. También se destruyó toda la infraestructura que montaron los traficantes para producir y sacar las cargas de drogas del sitio.
Pese a que se realizó en forma sorpresiva el operativo, en el lugar no se detuvo a ninguna de las personas que estaban procesando los panes de marihuana. Se cree que alguien filtró la información y le dio tiempo a que huyan; sin embargo, no se pudieron llevar casi nada y dejaron abandonadas en el sitio la droga y hasta motocicletas con las que se movilizan los traficantes.
El sitio donde se realizó la incursión es considerado como zona de influencia del Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP) y se encuentra en las inmediaciones donde fueron asesinados policías y se incineró una patrullera, según informaron.