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Las ocho peleas se llevaron a cabo en un ring montado en el tinglado del penal.
Unos 1.000 presos participaron activamente como espectadores, sin que se registrara un solo incidente.
El director de la prisión, Luis Barreto, dijo que los propios internos ya le pidieron repetir el torneo de boxeo, que fue promovido por el exboxeador profesional Favio “Potrillo” Romero y por el diputado nacional Ariel Oviedo.
Representantes de la Federación Paraguaya de Boxeo también fiscalizaron los combates, seis de los cuales fueron ganados por los reclusos, y en los otros dos enfrentamientos triunfaron los peleadores de afuera.
La iniciativa surgió como modo de canalizar y dirimir en el ring los conflictos surgidos entre los internos, muchas veces producto del hacinamiento extremo.
Barreto señaló, además, que la práctica de este deporte ayudó ya a varios reclusos a encontrar una nueva motivación para sobrellevar sus procesos.
“Una emoción inexplicable”
Víctor Juan Duarte Borja, de 24 años, fue capturado hace tres años luego de que, junto a una gavilla, robaran más G. 100 millones en un asalto con rehenes en Ciudad del Este, aunque fue trasladado a Tacumbú recién hace ocho meses, seis de los cuales lleva practicando boxeo en el sótano del penal, junto con otros 15 compañeros que integran el team “Leones de Tacumbú”.
“Siento una emoción inexplicable. Le dedico esta victoria a mi señora y a mis dos hijos, que vinieron a verme hoy”, dijo ayer tras ganar su pelea a un boxeador de afuera.
El recluso admitió que con el deporte está reencauzando su vida.