En esta ocasión, el policía acusado Osvaldo Javier Vera Espínola recusó al juez penal de garantías Gustavo Amarilla Arnica. Argumentó que el fiscal de la causa Rodolfo Fabián Centurión es amigo del magistrado, y que por esta situación no habría imparcialidad.
Vera Espínola presentó la recusación bajo patrocinio del abogado Carlos Mendoza.
En su contestación, el magistrado Amarilla Arnica solicitó a la Cámara de Apelaciones que rechace la recusación. Indicó que no le une ningún lazo de amistad con el fiscal Centurión, no conoce a su familia y que tampoco es su pariente.
Los acusados por tortura y lesión corporal en el ejercicio de funciones públicas vienen chicaneando impunemente desde hace casi 16 años. Los procesados ni sus abogados hasta ahora no fueron sancionados a pesar de que la Corte realizó varias auditorías al expediente.
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Además de Bower y Vera Espínola, también está procesado el comisario retirado Merardo Palacios. El cuarto acusado era Basilio Pavón, quien ya falleció.
Los antecedentes del caso de tortura refieren que policías en servicio denunciaron torturas tras el fallido intento de golpe de Estado en mayo de 2000, durante el gobierno de Luis González Macchi. Según los denunciantes, los apremios físicos padecidos por varios uniformados fueron realizados bajo la supervisión del entonces ministro del Interior Walter Bower, en la comisaria 11 metropolitana y en la Marina.
