Revisarán con escáner piezas que narcos pretendían enviar a Holanda

Los dos rodillos de metal, que serían parte de un molino de caña dulce, que la facción del cartel de Sinaloa desbaratada en Villa Elisa pretendía enviar a Holanda, serán sometidos a un escáner en un puerto privado de la capital. Los agentes de la Senad sospechan que ambas herramientas, traídas directamente de México en barco, tienen cargas de cocaína en su interior.

https://arc-anglerfish-arc2-prod-abccolor.s3.amazonaws.com/public/5TA2UBFNFZGLHFPVL7KA6YCSZU.jpg

Cargando...

Los dos rodillos, uno de ellos de 12 metros de largo y otro de tres, fueron embarcados el 18 de julio pasado en el puerto de Veracruz, México y semanas después llegaron al puerto privado Caacupemí de la capital en dos contenedores. De allí fueron retirados por el despachante aduanero Hernán Lázaro Liseras Osorio y llevados a un depósito que la organización criminal ya tenía alquilado en pleno centro de San Antonio.

De allí, los traficantes iban a enviar ambas piezas a Holanda, como material de exportación de la firma “La Paraguayita Import & Export”, que crearon para dicho efecto. Por ello sospechan que los rodillos tienen droga en su interior y para confirmar o descartar la hipótesis analizarán con escáner ambos elementos, que están hechos de hierro sólido, casi imposible de romper si no se tienen las herramientas necesarias, explicaron los agentes.

De acuerdo a los agentes de la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad), en los últimos meses el temido cártel de Sinaloa sufrió el decomiso de importantes cargas de cocaína, que iban a enviar a Europa. En todos los casos, la mercancía estaba oculta en el interior de herramientas o piezas de metal como estos rodillos que iban a ser embarcados a través de puertos mexicanos.

A raíz de las millonarias pérdidas que los organismos de seguridad mexicanos asestaron al cártel, los líderes de la estructura criminal trasladaron parte de sus operaciones en el Brasil, donde utilizaron el puerto de Santos para sus envíos al viejo continente. Sin embargo, la Policía Federal rápidamente detectó las operaciones ilegales de los narcos y en un corto tiempo incautó alrededor de tres toneladas de droga, que los traficantes intentaron remesar a países europeos con el mismo sistema, relataron fuentes de la Senad.

A raíz de la seguidilla de incautaciones en el vecino país, que significaron multimillonarias pérdidas, es que esta facción del cártel de Sinaloa se intentó afincar en Paraguay, específicamente en la ciudad de Villa Elisa.

Aparentemente, creían que iban a ser más seguras sus actividades desde nuestro país y que podrían sortear con facilidad los controles en los puertos privados instalados sobre el río Paraguay.

Sin embargo, nunca previeron que la Policía Federal de Brasil ya había fichado a uno de sus integrantes, el paraguayo Reinaldo Miranda Figueredo y pasaron sus datos a la Senad, cuyos agentes comenzaron a investigarlo. Precisamente, Miranda fue el encargado de armar toda la logística para que los narcos mexicanos se instalen en el país.

Fue así, que en la tarde del miércoles 7 de diciembre, la Senad desbarató la estructura criminal con la captura de cuatro mexicanos, Jimmy Wayne Galliel, Armando Carrillo, Marcos Antonio Castro y Martín Manuel Huerta Flores. Durante la intervención también cayeron dos taxistas paraguayos, Pablo Eliseo Brítez Núñez y Patricio Mario Fernández y se incautó 308 kilos de cocaína colombiana.

Luego se dictó orden de captura contra Reinaldo Miranda Figueredo, la abogada Norma Ortiz, el contador Teófilo Dejesús Mendieta, el despachante Hernán Liseras, el auxiliar de despachante Eduardo Lesme y el gestor Emiliano Gavilán Florentín.

De estos, solo Liseras y Mendieta se presentaron ante la Fiscalía y fueron imputados por narcotráfico y actualmente están recluidos en la cárcel de Emboscada.

Enlance copiado
Content ...
Cargando...Cargando ...