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Los tres delincuentes paraguayos transferidos ayer de la Agrupación Especializada a la penitenciaría de Tacumbú son antiguos miembros de una peligrosa megabanda de asaltantes: Adán Urunaga Cohene, capturado en 2012; Édgar Penayo Ríos, en 2015, y Orlando Efrén Benítez Portillo, también en 2015, luego de perpetrar un asalto en el que cayó abatido su cómplice, el famoso Nelson Gustavo López, alias Jakare Po.
El otro trasladado a Tacumbú es el brasileño Carlos Henrique Silva Cándido Taváres, miembro del PCC, detenido en 2014 tras una maratónica toma de rehenes en Santa Rita.
Los cuatro reos habían sido derivados en 2016 a la Agrupación Especializada, justamente desde el penal de Tacumbú, luego de un intento de fuga que fue desactivado por un grupo de guardiacárceles que encontró una carga de dinamita en gel con la cual los presidiarios pensaban volar uno de los muros perimetrales.
Posteriormente, se descubrió que otro de los ideólogos del plan de escape masivo era el capo Jarvis Chimenes Pavão, por lo que este último también fue desalojado de su celda vip de Tacumbú y confinado en una diminuta habitación de la Agrupación Especializada.
Semanas después del fallido escape, el guardiacárcel de Tacumbú Mario Lezcano Mereles (48) y su hijo Mario Alberto Lezcano Villalba (26) fueron asesinados en una emboscada en Lambaré, que fue ordenada precisamente por Pavão. Este último actualmente cumple tres condenas en Brasil.
Sin orden judicial
Los cuatro criminales devueltos ayer a Tacumbú estaban alojados en la Agrupación Especializada sin orden judicial, es decir, sin la orden pertinente y específica de un juez.
Resulta que el traslado de estos, de Tacumbú a la Agrupación, había sido acordado de manera informal entre las autoridades de ambas instituciones en aquella época en la que se descubrió el intento de escape, al alegarse motivos de seguridad.
Quedan otros 23
El cuartel de la Agrupación Especializada tiene actualmente 131 presos policías y quedan todavía otros 23 civiles recluidos, entre ellos por ejemplo el exsenador Óscar González Daher y su hijo (ver infografía).
La intención del Ministerio del Interior y de la Comandancia de la Policía Nacional es trasladar a todos los civiles a los establecimientos penitenciarios dependientes del Ministerio de Justicia.
Sin embargo, el traslado de los 23 presos civiles que quedan en la Agrupación se podrá llevar a cabo recién el próximo mes, cuando concluya la feria judicial, ya que los jueces de cada causa deben emitir resoluciones con los nuevos lugares de reclusión de los procesados.