NUEVA TOLEDO (Victor Daniel Barrera, de nuestra redacción regional). Desde el primer momento se manejó que los familiares recibieron un mensaje de texto en el que se les pedía la suma de US$ 300.000 que debían ser entregados en el distrito de Santa Rosa del Aguaray, departamento de San Pedro.
Ello levantó la sospecha de que el grupo autodenominado EPP estaría detrás del secuestro, atendiendo la alta suma solicitada y el lugar donde se pidió entregar el dinero.
Por otra parte, se maneja la hipótesis de que podría tratarse de una banda que opera en el este del país. Esto, en un principio, fue negado por la Policía, que en ese entonces todavía no tenía un panorama claro del hecho. Pero con las averiguaciones constataron su posible veracidad.
También se manejan rumores de que los familiares habrían contactado al propietario de una estancia llamada “Amalia”, ubicada a unos pocos kilómetros del lugar, con el fin de pedir ayuda económica para pagar el rescate.
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Los familiares de las víctimas no tiene un caudal económico importante, puesto que son personas trabajadoras de este distrito, y se dedican a la agricultura y la cría de ganado pero no a gran escala.
Los intervinientes llevan a cabo las pesquisas con mucho hermetismo, puesto que los secuestradores pidieron a la familia no involucrar a la Policía.
Escuchó el tractor
Un poblador y vecino de la propiedad de donde fueron secuestrados el septuagenario y su nieto, identificado como Valerio Grabowski, dijo que escuchó el ruido del motor del tractor que era utilizado por las víctimas para recorrer el predio, y alrededor de las 9:50 del lunes, se percató de que el motor paró, pero aclaró que fue sin ningún grito de auxilio o disparos de arma de fuego. Añadió que no llegó visualizar a los ahora secuestrados, debido a que hay una fina línea boscosa entre los límites de la propiedad.
Hasta el momento no se tienen novedades sobre el paradero del pequeño y de su abuelo.
Las investigaciones están a cargo de la fiscal de Ciudad del Este, Zunilda Ocampos y el fiscal de Asunción, Federico Delfino, en conjunto con el director departamental de la Policía, Crio. Willian Giménez.