Este tipo de abusos que comete a diario la defensora general, la liberal Noyme Yore Ismael, es lo que provoca la indignación de los funcionarios del Ministerio de la Defensa Pública.
Los empleados de esta institución se sienten humillados, no porque se le dé oportunidad a una humilde trabajadora, sino porque en la misma Defensoría hay personas capacitadas, que poseen título universitario inclusive, pero que no son tenidos en cuenta.
Isidora Mancuello es la funcionaria de la Defensoría General, que tiene contrato con la institución desde el 2015 y que fue recientemente ascendida como jefa del Departamento de Servicios Generales del Ministerio de la Defensa Pública. Tiene una asignación mensual de G. 2.500.000, y según los datos, tiene solamente título del ciclo básico.
Las fuentes también indican que Mancuello presta servicio como doméstica en la casa de Yore, los días sábados.
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Nepotismo institucionalizado
La defensora general Yore Ismael tiene 18 años de antigüedad al frente del Ministerio de la Defensa Pública. Casi todos los días se tienen noticias de que algún pariente suyo, su correligionario o alguien muy cercano a ella, es ascendido o nombrado en esta institución con un “jugoso” salario.
Una de las últimas designaciones de Yore Ismael fue a Fátima Yore como administradora de la Defensoría General de la sede que tiene en San Estanislao. Tiene una asignación mensual de G. 6.975.950.
Desde noviembre pasado, la secretaria general Natalia Álvarez Yore, su sobrina, fue beneficiada con G. 5.074.800, en concepto de bonificación por responsabilidad en el cargo. Tiene una remuneración total de unos G. 22.190.800.
Yore Ismael tiene mínimamente como 30 parientes en la institución. También está procesada por usurpación de funciones públicas.
El Jurado de Enjuiciamiento de Magistrados “no se da por enterado” de todos estos abusos.
No respondió a pedido
El 7 de diciembre pasado, funcionarios de la Defensoría solicitaron a Yore Ismael que destituya del cargo a su director de Planificación, el liberal Germán Fatecha, por permitir el uso de camionetas para un encuentro partidario de Efraín Alegre.