Al MEC le preocupa prescindir de una dirección que maneja fondos millonarios

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La viceministra de Educación, María del Carmen Giménez, señaló que la promulgación de la ley orgánica será un valioso paso, pero que el aspecto que les preocupa es prescindir de la Dirección General de Planes y Programas, creada por el ministro Enrique Riera y que hasta el 2020 manejará más de US$ 420 millones de los Fondos para la Excelencia.

La viceministra de Educación, María del Carmen Giménez Sivulec, añadió que la Carta Orgánica se constituye en un valioso paso y que “seguramente sugerirán su aprobación”, ya que el ministerio siempre estuvo sujeto a la voluntad o al criterio de las administraciones de turno por no contar con una ley orgánica.

“Un marco legal así es un paso importante porque va a ordenar esa gestión y también la administración en sí, estableciendo límites más claros en la estructura. Además tiene muchos avances. Creemos que es valioso el paso de contar con esta ley y así limitar la discrecionalidad con la que siempre se ha asumido la administración del ministerio”, dijo.

La preocupación de Riera y de quienes se ocupan de la gestión del sistema actualmente es prescindir de la nueva Dirección General de Planes y Programas, creada bajo su administración. Con la ley, esta dependencia que ejecuta proyectos con los Fondos para la Excelencia tendrá que desaparecer, explicó Giménez.

“Esta unidad se ocupa de la ejecución de todos los proyectos de inversión que tenemos, y se decidió crearla justamente por la baja capacidad técnica del ministerio, que es una realidad que seguimos sufriendo. Somos bastante lentos en la ejecución de los recursos y en los programas de mejoras, lo cual derivó en esta crisis. Por eso está instalada esta dirección con el perfil de aislarse de la problemática de la gestión diaria y concentrarse exclusivamente en los programas de inversión”, agregó.

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Subrayó que no tienen plan B, y que temen que todos los proyectos de inversión se retrasen en caso de que se promulgue la ley, pero que van a apoyar el esfuerzo y van a ir evaluando su funcionalidad para luego plantear los ajustes necesarios.

Alternativas

Óscar Charotti en nombre de Juntos por la Educación, organización que formó parte de la elaboración de la carta orgánica del MEC, apuntó que están a disposición del ministerio para reorientar la Dirección General de Planes y Programas como unidad ejecutora.

“El ministro con un decreto puede mantener la dirección y seguir trabajando, ya no como tal pero sí como una unidad temporal de apoyo que funcionará mientras dure el programa de inversión y se concreten los proyectos. Lo que hace la ley orgánica es regular la creación de direcciones”, dijo.

El director de la Comisión de Educación de la Cámara de Diputados, Gerónimo López indicó que decidieron aceptar ayer la última modificación introducida por el Senado a la primera Carta Orgánica del MEC. Se completó así el cuarto trámite constitucional. “Ni bien consigamos todas las firmas vamos a presentar por mesa de entrada el dictamen para que vaya a consideración de la plenaria y la semana que viene ya entraría a consideración”, dijo.

Una vez se apruebe la ley, el MEC pasará a llamarse Ministerio de Educación y Ciencias. Además se introducen otras innovaciones: se crea el Instituto Nacional de Evaluación Educativa (de acuerdo al convenio firmado con la Unesco); se crea el Consejo Nacional de Educación Técnico Profesional, el Viceministerio de Ciencias y se establece un nuevo Consejo Nacional de Educación, en reemplazo del Consejo Nacional de Educación y Cultura (Conec) dado que ya existe un Consejo Nacional de Cultura, desde la promulgación de la Ley 3051 y se establecen los mecanismos de conformación y las funciones del Consejo Departamental de Educación.

Crecimiento desregulado

En el 2008 el MEC creó 3 viceministerios y 15 direcciones generales y en el año 2013 saltó a 5 viceministerios y 31 direcciones generales y otras 90 direcciones, que demandaron nuevos rubros. Con la ley se quiere evitar la discrecionalidad y promover una mayor seguridad jurídica, además de corregir el estado de flexibilización legal.