“Trataré de no ser duro, pero sí realista: siento que hay que pedirles disculpas a los niños porque es momento de darles una buena educación porque ellos pueden aprender mucho más de lo que reciben”, dijo Gun, tras recorrer varias instituciones educativas del departamento de Caaguazú e interactuar con niños menores de 5 años, para realizar un relevamiento in situ de la capacidad de aprendizaje de los mismos.
Julio Gun es asesor del programa “Tikichuela Ciencias en mi Escuela”, que se impartirá a través de una metodología que utiliza audios que se pasarán en las clases de preescolar de 292 escuelas del departamento de Caaguazú, a partir del mes de marzo de 2017.
“Las posibilidades y el potencial que hay aquí en Paraguay, con los chicos que tiene, son extraordinarios. Ellos pueden absorber proyectos de calidad de primer mundo. Yo vine de ese recorrido con una sensación de que tengo que pedir perdón. Pensaba que el nivel cognitivo de los chicos era inferior por todo lo que leí al respecto, pero al evaluar sus niveles, pude compararlos rápidamente con réplicas de otros países y quedé sorprendido”, indicó.
Faltan herramientas
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Gun resaltó que los docentes no cuentan con herramientas adecuadas para motivar. “Por lo que pude ver el problema ya no son los chicos, el problema es cómo enseña el docente y cuáles son sus herramientas. Todo el esfuerzo en la capacidad, el control y seguimiento, apoyo y tutoría deben enfocarse en los docentes para que los chicos suban de nivel. Debemos darles herramientas a los docentes para que eleven su capacidad y formación. Ese es el camino”.
Además sugirió que se debería volver a evaluar a los niños, pero tras recibir conocimientos, porque los pequeños pueden aprender de todo, pero si no se les enseña no van a pasar ninguna evaluación externa.