En la víspera, la asegurada Olga Cañete lamentó haber tenido que esperar cuatro meses para hacerse una tomografía. Graciela Benítez que tiene internado un familiar en la unidad de terapia intensiva del Hospital Central dijo que su padecimiento diario es subir y bajar las escaleras hasta el séptimo piso, porque los ascensores están descompuestos. Además denunció la falta de insumos básicos como algodón y jeringas.
El titular del ente, Benigno López dijo que están en deuda con los asegurados y que a pesar de que el fondo de Salud está en déficit cuentan con el 85 por ciento del stock de medicamentos y están trabajando para completar las edificaciones.
