Las facultades de la Universidad Nacional de Asunción (UNA) se encuentran en movilización constante, pero el rector Abel Bernal actuó de nexo entre los estudiantes y los miembros del Consejo Superior Universitario (CSU) para iniciar las negociaciones que desembocarían en evitar el paro en la casa de estudios.
El conflicto se inició cuando los consejeros, en su última sesión, votaron por dilatar el estudio del proyecto del estatuto recién para dentro de dos meses. Esto motivó la movilización de los estudiantes, quienes incluso amenazaron con endurecer sus protestas, con un paro.
Ayer, los estudiantes redactaron un extenso documento en el que solicitan al rector convocar de urgencia a una sesión del consejo.
Fernando Krug, vocero de #UNAnotecalles, dijo que los consejeros presentaron tres alternativas en cuanto al estudio de la propuesta de la modificación del estatuto.
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La primera oferta fue llamar a una asamblea. En la segunda mocionaron que se otorgue más tiempo, al menos hasta fines de agosto, para estudiar e introducir cambios al proyecto de estatuto. Y, en tercer lugar plantearon postergar las elecciones para integrar el consejo directivo, que están calendarizadas para el mes de octubre.
La universitaria Amalia Ríos explicó que los estudiantes van a otorgar más tiempo para que se socialice el borrador del estatuto, pero a cambio existen puntos innegociables.
“Hay capítulos y artículos que deben ser incluidos antes de las elecciones del consejo directivo de las facultades (calendarizado para este octubre) y que tienen que ver con la transparencia de concursos, la limitación de los cargos de confianza y la revocatoria de mandato”, explicó Ríos.
#UNAnotecalles estará expectante de lo que se resuelva en la sesión del CSU de mañana. No obstante seguirán movilizados. La Facultad de Ingeniería continuará en paro exigiendo la renuncia de su decano Éver Cabrera y de toda la directiva.
