Más de 100 millones de litros de líquido tóxico están almacenados en dos piletas, que están rodeadas por las aguas crecidas del río Paraguay.
La Contraloría inició un sumario y para recabar datos del lugar, cuatro funcionarios llegaron ayer a Cateura, encabezados por el director de Ambiente del ente, Humberto Franco.
Los funcionarios explicaron que estuvieron recabando datos y, para complementarlos, la Contraloría pedirá un informe completo a la Seam.
Las aguas del río Paraguay siguen creciendo y los pronósticos de expertos indican que seguirá subiendo.
Todos los beneficios, en un solo lugar Descubrí donde te conviene comprar hoy
Amenazas a la prensa
Los gancheros y los guardias de la firma Empo amenazaron e intentaron agredir a un periodista y a un reportero gráfico de este diario ante la atónita mirada de los auditores de la Contraloría.
Desde hace varios años, la firma Empo no permite el ingreso de la prensa ni de estudiantes para investigación universitaria. Hace un mes les negaron el acceso a Cateura a unos estudiantes de la Universidad de Yokohama, Japón.
Ministro minimiza
En la página oficial de la Seam se publica que dicha institución descarta una posible catástrofe en Cateura.
Conforme con el ministro Rolando de Barros Barreto, para que los residuos y el lixiviado se filtren “deben superar (las aguas crecidas) la cota 64: el río debe subir más de 10 metros”. Agregó que Cateura “está totalmente controlado”.
De los problemas
Conforme con expertos y la mayoría de los lectores que opinan en el ABC Digital, no hace falta ser técnico para entender que no es necesario esperar que el agua alcance la corona superior de la pileta para que haya un desastre. Ese talud y corona es de tierra, que cederá con la mínima presión tanto de los lixiviados como por las aguas del río. Además, las aguas infiltran bajo el suelo, por lo que no se descartan estos hechos.
Por otro lado, tampoco se realiza el relleno sanitario, ya que el área está bordeada de agua y no hay suelo arcilloso para el tratamiento, y la Seam no verifica.
El gerente Ortuoste no contacta con la prensa ni permite el ingreso de la misma al vertedero. Sin embargo, bajo un artículo publicado en ABC Digital hay un perfil con su nombre que asegura que envió información que “ABC no publica”. A la redacción de este diario no envió nada.
