Los vecinos creen que los operarios no tienen ni un poco de conocimiento del cuidado de jardines, porque vienen en patota, cortan todo rápido, no podan los pequeños árboles que van creciendo torcidos o tienen las raíces expuestos al aire, que están constantemente amenazados por los fuertes vientos. El colmo es que ni siquiera retiran la basura que generaron.
El arquitecto José Segalés, director de Desarrollo Urbano, dijo la semana pasada a nuestro diario, ante la invasión paulatina de vendedores informales en los espacios públicos y su falta de cuidado y mantenimiento, que la Municipalidad buscará padrinos para los espacios verdes. Eso significa que el sector privado al final se encargará del trabajo de la Comuna.
